Los perros no saben parar ¿Realidad o ficción?

Esta es un pregunta que os hacía el otro día por historias y muchos os sentisteis identificada en ella . Es una afirmación comúnmente aceptada a nivel social y habla mucho de la percepción de los perros; sin embargo ¿qué hay de cierto en ella? La realidad es que los perros SI saben parar ya que como todos los animales su cuerpo tiende a buscar la homeostasis que es un equilibrio dinámico en su fisiología. Así cuando los perros tienen una buena percepción de como está su cuerpo son capaces de parar y volver a recargar energía.

Y tener una buena percepción de cómo se encuentra su fisiología aquí es el concepto CLAVE , porque cuando los perros se encuentran en modo supervivencia esto no ocurre. En este espectro vemos perros con niveles de estrés muy elevados a menudo cronifcidado en el tiempo.

Esto suena un poco a chino así que vamos a poner un ejemplo: imaginate que te persigue un Oso polar (de esos que pueden llegar a pesar una tonelada) tu cuerpo se pone a punto para afrontar el reto y se despliegan muchos recursos que gastan energía como si no hubiera un mañana; el corazón se te acelera, la boca te sabe a metal y sientes que podrías escupir fuego como sí fueras un dragón…

Muchos de nuestros perros viven en modo persecución de oso polar y cuando te preocupas por sobrevivir a ese instante en concreto poco le importa a tu cuerpo como se encuentre ; la historia va de poder salir del paso. Y así muchas perros pierden la percepción corporal propia o propiocepción y no saben cuándo tienen que parar porque no saben ni como están.

Esta historia no va de que les tengamos que regular siempre (aunque a veces es necesario), va de que nuestros perros tengan unos niveles de estrés controlados que les permita desarrollarse como individuos y saber cuando necesitan parar.

¿Cómo podemos ayudarles nosotros?

Escucha atentamente que te lo cuento el secreto mágico es …. que no hay secretos porque no es un bizcocho es un ser vivo con su emocionalidad carácter y su mochila emocional.

Mi trabajo consiste precisamente en ayudarte a ayudar a tú perro , entender su comunicación cuando pide parar (aunque sea de forma sutil hablando muy bajito) y acompañaros a gestionar las cosas que en el día a dí se le hacen bola.

¿Así de facil? Pues sí y no porque para poder acompañar a un perro como el individuo complejo que es muchas veces tenemos que derribar muchos mitos y creencias, afrontar miedos y dar saltos al vacío…sostener cuando te necesita y darle alas cuando no. Puede ser que esto se te haga un mundo y en el día a día ambos estas en modo supervivencia pero… y si os ayudan a salir de ahí?

Ayudamos perros, acompañamos familias. El arca.