El contexto importa

Entornos donde los perros de caza puedan ser ellos mismos. Tendrás más suerte encontrando al bigfoot.

PERROSCAZA, IMPULSO PREDATORIO

9/16/20242 min read

En la sociedad moderna la naturaleza salvaje escasea, escasean los entornos poco modificados donde el hombre no haya metido mano en uno u otro sentido. Espacios realmente conservados y vírgenes en todo su esplendor, algo más difícil de encontrar que el bigfoot en una playa de Costa Rica . Y para que te cuento todo esto - estarás pensando , pues porque esto afecta inmensamente a todos los perros y es algo particularmente dañino para los perros con un impulso de caza alto , hablo de setters , beagles, dálmatas, perros que fueron genéticamente seleccionados para dar rienda suelta a lo que mejor se les da ; cazar . Alejarse distancias considerables del referente humano en busca de un conejo, un jabalí o lo que se tercie.

Y esto en los entornos “naturales” actuales es realmente complicado bien porque están muy cerca de carreteras y cultivos, bien porque los bosques que tenemos son de dimensiones realmente pequeñas para las distancias que manejan estos perros durante la caza, o están demasiado parcelados o porque hemos introducido ganado y evidentemente a ningún pastor le hace gracia que se coman a sus ovejas.

Pensarás que exagero y no es para tanto, pues vamos a ver un ejemplo de parque nacional como son Los picos de Europa que se encuentran en Asturias, León y Cantabria . En ellos aunque la naturaleza está “protegida” bajo la premisa de modificar mínimamente el ecosistema se permite la ganadería, habiendo en todo el parque nacional abundancia de vacas , cabras y ovejas que como cualquier ser vivo que habite un ecosistema lo modifica fallando así la normativa en su esencia de preservar la naturaleza tal y como es. En estos parques donde se permite la ganadería también se permite la presencia de perros de guarda (en Asturias son Mastines) que están amparados legalmente para desempeñar su labor de guardar y proteger al rebaño en caso de ataque por depredador (que en la península ibérica es el lobo o en su defecto el lince). En conclusión tenemos un espacio “protegido “ que está siendo modificado introduciendo animales domésticos herbívoros que arrasan a su paso toda hierbecilla que pillan causando un gran desequilibrio en el ecosistema como el que se produjo en Yellowstone al eliminar a los lobos. Tenemos perros de guarda que impiden a los lobos ( animales salvajes autóctonos y carnívoros) equilibrar el ecosistema matando las presas más viejas o enfermas . En definitiva todo esto es de todo menos un espacio protegido.

Y bajo este pretexto reflexiono lo ~jodidos~ que están nuestros perros de caza, aquellos que domesticamos y nos ayudaron no hace tanto . Bajo falsos pretextos de protección de la naturaleza se ha creado una doble vara de medir qué ampara a los ganaderos y los perros que los acompañan y demoniza a los perros de particulares por su terrible impacto ecosistémico. Por lo que nuestros perros ya no pueden campar a sus anchas por áreas poco modificadas porque no existen (y aunque existieran habría una normativa que recalcaría repetidamente el “gran peligro” que suponen para el ecosistema). Tampoco por zonas naturales modificadas porque las áreas son demasiado poco extensas o están fragmentadas y llenas de peligros como carreteras o ganado.

Hemos generado una máquina perfectamente engrasada para cazar que se ahoga teniendo que ir atada a una correa de 10 metros (con mucha suerte) y con una sociedad que no valora sus impulsos prevalentes. Necesitan libertad , necesitan distancia y necesitan comprensión.